Los cuervos de Nueva Caledonia, conocidos por su inteligencia, pueden calcular aproximadamente la masa de un objeto sin contactarlo directamente, sino observando cómo se mueve según la corriente de aire. El estudio fue publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B.
Los cuervos de Nueva Caledonia (Corvus moneduloides) son conocidos por su habilidad no solo para usar, sino también para hacer herramientas. Para obtener alimentos en la naturaleza, hace ganchos y espinas de material vegetal, con los cuales saca larvas nutritivas de debajo de la corteza. Los cuervos pueden tomar los instrumentos con ellos para usarlos en el futuro. Los modelos específicos utilizados por los cuervos en diferentes áreas son preservados y reproducidos por otros animales con gran precisión durante décadas. Los estudios sugieren que los cuervos recuerdan cómo es la apariencia de los instrumentos creados por otros cuervos y los reproducen de memoria. Esta propiedad rara vez se encuentra en otra especie que no sea la humana.
En otro experimento con cuervos, el grupo de Rachael Miller de la Universidad de Cambridge decidió averiguar si las aves, como los humanos, pueden estimar la masa relativa de un objeto por la forma en que se mueve en el flujo de aire. Experimentos previos con chimpancés han demostrado que los monos pueden clasificar los objetos por peso, pero no pueden calcularlo solo con observaciones.
Atentos observadores
Para probar las habilidades de las aves, Miller y sus colegas capturaron 12 cuervos salvajes en 2016 y 2017 y los dividieron en dos grupos. Un grupo recibía un bocadillo de carne si lanzaba la pieza más pesada en un tubo especial, y el otro grupo, por el contrario, si lanzaba la más liviana. Los experimentadores utilizaron cubos grises y rojos que pesaban unos 10-15 gramos como objetos pesados, y cubos blancos y azules y bolas de poliestireno que pesaban menos de un gramo como objetos ligeros.
Luego, durante tres días, mostraron a los cuervos objetos nuevos y desconocidos de arcilla y poliestireno delante de un ventilador encendido o apagado: cuando el ventilador estaba encendido, el objeto más ligero se balanceaba en el viento, mientras que el más pesado permanecía inmóvil. Asimismo, los científicos pintaron o envolvieron objetos para que los cuervos no pudieran comprender de qué material estaban hechos.
Después de asegurarse de que las aves de cada grupo aún recuerdan qué elemento debían elegir para recibir la golosina, los investigadores nuevamente mostraron a los cuervos los objetos con el ventilador y la caja de golosinas. “Aunque las aves no tenían la capacidad de interactuar directamente con estos elementos antes de la prueba, eligieron el elemento correcto en el 73% de los casos en que se encendió el ventilador, y alrededor del 50% de las veces en que se apagó. Nuestros resultados muestran que los cuervos utilizaron el conocimiento que ya tenían sobre el comportamiento de los objetos de diferentes masas en el viento para calcular la masa relativa del objeto que necesitaban y seleccionarlo”, dice el artículo.
Una posible explicación
Los autores, en particular, enfatizan que con el ventilador encendido, 11 de las 12 aves tomaron la decisión correcta desde el primer intento (con el ventilador apagado, 6 de las 12 aves no se equivocaron). Esto, en su opinión, significa que los cuervos no identificaron el objeto deseado durante el experimento en sí, sino que utilizaron información de observaciones anteriores del ventilador y los objetos.
Los científicos también señalan que la información sobre la masa de un objeto puede ser valiosa para los cuervos, ya que se alimentan de nueces y caracoles, que cortan arrojándolos sobre superficies sólidas desde una altura.
El año pasado, biólogos alemanes y británicos demostraron que los cuervos de Nueva Caledonia fueron capaces de crear las herramientas que habían visto antes, de memoria, según un artículo publicado en Nature. Esta capacidad puede permitirles modificar tanto sus propias herramientas como las que ven en otros cuervos, transmitiendo de este modo sus habilidades a otros animales.
Fuente: nmas1.org