Cerca de 4.000 herramientas de piedra y restos de fauna, así como tres nuevas piezas de arte mueble de una cronología comprendida entre los 14.000 y 15.000 años es el balance de la campaña de excavación realizada esta primavera en el Molí del Salt (Vimbodí i Poblet, Tarragona), bajo la codirección de Manuel Vaquero y Susana Alonso, investigador y colaboradora del IPHES (Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social) (Catalunya, España) respectivamente.
Para entender el valor de las nuevas piezas de arte mueble que se han recuperado este año, hay que tener en cuenta que la estratigrafía, o secuencia de niveles arqueológicos, del Molí del Salt se divide en dos conjuntos principales: el A y el B. La campaña de 2017 se ha centrado en la excavación de la parte superior del conjunto B, de una cronología comprendida entre los 14.000 y los 15.000 años antes del presente. Desde el punto de vista cultural corresponde al Paleolítico superior y, más concretamente, al período que se conoce como Magdaleniense superior.
“Es importante haber encontrado piezas de arte mueble en el conjunto B, ya que confirma –apunta Manuel Vaquero- que las evidencias de esta expresión artística se distribuyen por toda la secuencia estratigráfica. Hasta ahora, la mayoría de las piezas se habían hallado en el conjunto A, con una cronología de entre los 13.000 y los 14.000 años antes del presente. El hecho de que en las últimas campañas se hayan identificado evidencias de arte en el conjunto B indica que la realización de representaciones artísticas tuvo lugar a lo largo de toda la ocupación del Molí del Salt. Esto es muy importante, ya que nos permitirá conocer la evolución del estilo y las técnicas artísticas durante un período de 2.000 años, entre los 13.000 y los 15.000 años antes del presente”.
Las piezas de arte mueble son tres placas de esquisto con grabados. “Ahora las tendremos que someter a un trabajo de limpieza muy laborioso, razón por la cual la descripción de los motivos representados es aún muy preliminar. No obstante, se han podido identificar ya algunas representaciones de animales”, comenta Susana Alonso.
Las tres nuevas piezas se añaden a las que se han obtenido en el Molí del Salt desde que se iniciaron los trabajos arqueológicos en 1999, constituyendo ya una colección de 22 piezas. “Esto confirma que este yacimiento es un referente para el estudio del arte mueble paleolítico, no sólo en Catalunya, sino también en el conjunto de la península ibèrica”, remarca Manuel Vaquero. Hay que recordar que las evidencias de arte paleolítico siempre habían sido muy escasas en Catalunya, cosa que representaba una clara anomalía en relación al resto de la península.
Como es habitual en los yacimientos de esta cronología que se encuentran en la vertiente mediterránea peninsular, la mayoría de los restos de fauna corresponden a conejos. No obstante, hay también fósiles de animales más grandes, como ciervos, cabras y jabalíes. De los restos recuperados esta campaña hay que destacar un fragmento de asta de ciervo muy bien conservada. Todos presentan evidencias claras (marcas de corte, fracturas…) que indican que los animales fueron cazados y consumidos por los humanos.
En cuanto a las herramientas de piedra, casi todas son de sílex, material bastante abundante en el entorno del yacimiento. Se encuentra todo el abanico de herramientas típicas de un campamento de cazadores, tanto domésticas utilizadas en diferentes actividades – trabajo de las pieles, procesamiento de los recursos animales y vegetales – como puntas de proyectil para la caza.
En la excavación de esta primavera han participado 10 personas, distribuidas de la siguiente manera: dos eran personal IPHES, seis estudiantes del Máster Erasmus Mundus de Arqueología del Cuaternario y Evolución Humana de la Universitat Rovira i Virgili de Tarragona (URV), uno del mismo máster pero de la Universidad de Ferrara, y un estudiante de grado de la Universidad Complutense.
Para la realización de los trabajos se ha contado con la aportación económica del Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya y del Ajuntament de Vimbodí i Poblet. Es una excavación que se efectúa en el marco del proyecto de investigación “Evolución paleoambiental y poblamiento prehistórico en las cuencas de los ríos Francolí, Gaià, Siurana y rieras del Camp de Tarragona”.
Fuente: noticiasdelaciencia.com