Recientemente, un equipo de investigadores en China ha descubierto un nuevo bacteriófago en una muestra de sedimento tomada en la Fosa de las Marianas, el lugar más profundo de la Tierra
Científicos han anunciado el descubrimiento de un nuevo virus en las profundidades de la Fosa de las Marianas, marcando un hito al encontrar el virus más profundo de su tipo jamás documentado.
Este virus, identificado como vB_HmeY_H4907, fue localizado a una asombrosa profundidad de 8.839 metros en el interior de la Fosa de las Marianas, la fosa oceánica más profunda de la Tierra, con su punto más bajo alcanzando unos 11.000 metros en el fondo del Océano Pacífico.
«Hasta donde sabemos, se trata del fago aislado más profundo que se conoce en el océano», afirma Min Wang, uno de los investigadores y profesor de la Universidad Oceánica de China.
Este virus es un bacteriófago, un organismo que infecta bacterias y utiliza su maquinaria celular para reproducirse. Los resultados de esta investigación fueron publicados en la revista Microbiology Spectrum.
Familia vírica hasta ahora desconocida
Este no es el primer descubrimiento humano de un bacteriófago en la Fosa de las Marianas. Por ejemplo, en 2022, según reporta Interesting Engineering, un equipo de científicos identificó un virus denominado HMP1 en la región hadal de la fosa, donde las profundidades varían entre 6.000 y 11.000 metros.
Sin embargo, lo que distingue a vB_HmeY_H4907 y lo convierte en un descubrimiento fascinante, según Wang y su equipo, es que apunta a la existencia de una familia vírica completamente nueva en las profundidades oceánicas. Además, ofrece nuevas perspectivas sobre la evolución, diversidad y características genómicas de los fagos de las profundidades marinas y sus huéspedes.
Virus podría haber coevolucionado con bacterias
Este virus tiene como blanco específico a las bacterias del género Halomonas, que son conocidas por habitar en entornos de aguas profundas y cerca de respiraderos hidrotermales. Sin embargo, a diferencia de otros bacteriófagos que destruyen a sus huéspedes, vB_HmeY_H4907 es muy similar genéticamente a su huésped y es un fago lisogénico, lo que significa que inserta su material genético en la bacteria sin matarla. Esto sugiere una coevolución entre el virus y las bacterias, permitiendo su supervivencia en condiciones extremas.
Según informa Live Science, estas bacterias y virus que habitan en las profundidades son tan extraños para los humanos que nuestro sistema inmunitario ni siquiera los reconoce, haciéndolos virtualmente invisibles para nosotros.
No obstante, medios científicos enfatizan que es altamente improbable que un fago de las profundidades marinas represente una amenaza para los humanos en la superficie, dado que estos virus están altamente adaptados a sus huéspedes y entornos.
El próximo objetivo de los científicos es descubrir más virus en las profundidades marinas y profundizar en su misteriosa interacción con los huéspedes. Este enfoque podría ayudar a desentrañar cómo estos microorganismos sobreviven en hábitats extremos.
«Dondequiera que haya vida, se puede apostar a que hay reguladores trabajando», como estos «virus, en este caso», concluyó Wang.
Fuente: dw.com