Se trata de la imagen de un cerdo verrugoso pintada hace 45,500 años en una cueva
“Hasta donde sabemos, la pintura del cerdo de Célebes que encontramos en la cueva de piedra caliza de Leang Tedongnge es actualmente el trabajo artístico figurativo más antiguo del mundo”, dijo en un comunicado Adam Brumm, uno de los líderes del equipo científico de la Universidad de Griffith y el centro de investigación arqueológica indonesia ARKENAS.
La imagen reemplaza como pintura rupestre figurativa más antigua del mundo a otra descubierta en 2020 en la misma isla por el equipo de Brumm que representaba una escena abstracta de caza de hace 43,900 años.
El nuevo hallazgo se ocultaba dentro de una de las paredes internas de la cueva Leang Tedongnge, situada en un valle rodeado de acantilados escarpados de piedra caliza en el sur de la isla de Célebes y solo se puede acceder a ella durante la temporada seca por un pequeño pasaje que permanece inundado durante la época de lluvias.
Los lugareños, del grupo étnico Bugis, aseguraron que, a excepción de ellos, nadie más se había adentrado en la cueva hasta que llegó este equipo de arqueólogos en 2017.
El cerdo verrogoso, inspiración en la era del hielo
Este cerdo endémico de la isla indonesia aparece en la representación con una cresta roja de pelos erguidos y un par de verrugas faciales delante de los ojos, un rasgo característico de los ejemplares adultos.
“Pintado con pigmento rojo ocre, el cerdo parece estar observando una pelea o interacción social entre otros dos cerdos verrugosos”, apuntó Brumm, arqueólogo de la universidad australiana de Griffith al referirse al estudio publicado en la revista científica Science Advances.
Estos cerdos verrugosos han sido representados durante miles de años por los antiguos humanos en la zona, especialmente durante la era de hielo, lo que, según el arqueólogo, sugiere que no solo fueron fuente de comida sino también de expresión artística.
El rastro de la ‘Palomita’ de maiz rocoso
Para determinar la edad de la pintura rupestre de Leang Tedongnge, los científicos se apoyaron en la medición de la degradación radiactiva del uranio de los depósitos de calcio carbonado que se formaron en la superficie del “lienzo” rocoso utilizado para plasmar este cerdo.
“En Leag Tedongnge se formó una especie de ‘palomita de maíz’ rocosa detrás de una de las patas de la imagen del cerdo después de ser pintado, lo que nos permitió determinar la edad mínima de la pintura”, explicó por su lado otro de los líderes del equipo, Maxime Aubert, de la Universidad de Griffith.
Wallacea esconde más secretos
Además de la imagen de este cerdo de 45,500 años de antigüedad, los científicos descubrieron en una cueva cercana otra pintura similar que data de hace 32,000 años, que se suma a la de 43,900 años de antigüedad, hasta ahora considerada como la más antigua.
Esta última pintura descubierta en 2020 tiene la peculiaridad de representar seres abstractos que combinan características humanas y animales, conocidas como “teriántropos”, que cazan grandes mamíferos con lanzas y cuerdas, lo que puede ser, según el experto, la prueba más antigua de la habilidad humana para imaginar “la existencia de seres supernaturales, la piedra angular de la experiencia religiosa”.
Las pinturas rupestres de Célebes están entre las evidencias más antiguas de la presencia de los humanos modernos en las islas oceánicas entre Asia y Australia-Nueva Guinea, una zona bautizada como “Wallacea”.
“Nuestras especies deben de haber cruzado Wallacea en embarcaciones para llegar a Australia hace unos 65.000 años”, señaló Aubert, al considerar que es posible que futuros trabajos muestren evidencias arqueológicas de esa época o incluso anterior a ella.
Fuente: EFE