El antiguo cráneo de 300.000 años de antigüedad abre nuevas incógnitas sobre la genealogía humana
Un sorprendente hallazgo ha abierto una nueva interrogante sobre la evolución. Un equipo de paleontólogos de la Academia China de Ciencias, en colaboración con colegas de otras instituciones académicas de España y Reino Unido, encontraron un cráneo que marcaría un nuevo capítulo del árbol genealógico humano.
En un estudio publicado en el Journal of Human Evolution, los investigadores han presentado las pruebas de su hallazgo, un fósil en cuestión etiquetado como HLD 6.
En concreto, lo que encontraron en la región de Hualongdong -este de China- en 2015, fue una mandíbula o maxilar inferior, junto con otros 15 especímenes, todos ellos originarios del Pleistoceno medio tardío, como recolecta el medio ‘DW’.
Esto lo ubica en la línea de tiempo hace unos 300.000 años, una época que se considera crucial para la evolución de los homínidos, especies consideradas humanas o estrechamente emparentadas, incluidos los humanos modernos.
El estudio del equipo de investigadores, publicado el 31 de julio, concluye que la mandíbula es «inesperada» y no encaja en ningún grupo taxonómico existente.
Gracias al análisis detallado de la mandíbula identificaron que su estructura facial se asemejaba a la del linaje humano moderno que viene del Homo sapiens, pero carecía de barbilla, lo que lo conecta con especies más antiguas, como los denisovanos, que se separaron de los neandertales hace más de 400.000 años.
«Los hominidos HLD apoyarían la aparición de morfologías modernas relacionadas con el clado H. sapiens en Asia ya alrededor de 300 ka», escribió en su cuenta de Twitter la autora del estudio María Martinón-Torres, directora del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH) en España.
«Los hualongdong son, por tanto, la población fósil más antigua conocida en Asia que presenta este mosaico de rasgos primitivos y similares a los de H. sapiens», dijo a ‘CNN’.
Los investigadores teorizan que el HLD 6 debe pertenecer a una clasificación que todavía no tiene nombre.
Se cree que el HLD 6 perteneció a una persona de entre 12 y 13 años. Aunque no hay un cráneo adulto de la misma especie con el que comparar, por lo que se utilizaron cráneos de homínidos del Pleistoceno medio y tardío de edad similar y adulta y descubrieron que sus patrones de forma se mantenían constantes independientemente de la edad, lo que apoya aún más la teoría de los científicos.
Según Martinón-Torres, se necesitan más trabajos para situar correctamente al HLD 6.
«Hacen falta más fósiles y estudios para comprender su posición precisa en el árbol genealógico humano», afirmó al medio mencionado.
Fuente: eltiempo.com