Investigadores encabezados por el Dr. Gerardo Carbot, investigador de la Semahn, anunciaron el hallazgo del fósil de una tortuga que existió hace 30 millones de años.
Un equipo de paleontólogos mexicanos, conformado por especialistas de la Universidad del Mar, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach), liderados por el Dr Gerardo Carbot Chanona, del Museo de Paleontología Eliseo Palacios Aguilera, de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn), dieron a conocer en la prestigiosa revista Historical Biology, el descubrimiento de una nueva especie de tortuga que habitó hace 30 millones de años, en lo que hoy es el norte de Oaxaca.
La nueva especie de tortuga fue bautizada como “Stylemys gisellae”, y pertenece a la familia Testudinidae, un grupo de tortugas de hábitos estrictamente terrestres que habita en varias regiones del mundo; entre las más conocidas podemos contar a las tortugas gigantes de las Islas Galápagos.
El ejemplar fósil descrito consta de un caparazón medianamente preservado y tiene una longitud total de 92 cm, lo que la convierte en una de las tortugas más grandes encontradas alrededor del mundo. Esta tortuga fue descubierta en las cercanías del poblado Santiago Yolomécatl, Oaxaca, y se encuentra bajo resguardo del Laboratorio de Paleobiología de la Universidad del Mar, Campus Puerto Escondido.
La tortuga “Stylemys gisellae”, amplió el rango geográfico que se tenía para la familia Testudinidae, además de que es la primera tortuga descrita para el Oligoceno de México. Su descubrimiento es importante, pues ayuda a entender qué especies habitaron México hace millones de años.
Sin embargo, los paleontólogos que la estudiaron aún trabajan para responder otros interrogantes: ¿Cuáles eran las condiciones climáticas en las que vivía? ¿Por qué se extinguió?, preguntas que, de ser respondidas, ayudarán a entender mejor como los procesos de cambio climático afectan a la biodiversidad actual y nos ayudarán a tomar mejores acciones ante esta problemática.
Este trabajo es un estudio realizado por investigadores de diferentes instituciones de otros estados, lo que realza la importancia de investigar y aportar conocimiento para conocer más sobre organismos pasados del sureste de México.
Fuente: diariodechiapas.com