Cree que ‘lo más probable’ es que la ciencia consiga una vacuna
“La gente necesita escuchar el mensaje de que esto es serio pero que lo vamos a superar”, aunque con un “horizonte temporal incierto”, señala a Efe en un cuestionario este químico, editor en jefe de la familia de revistas de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia (AAAS), entre ellas la publicación Science.
Por lo tanto, “lo más urgente ahora es mantener el distanciamiento social para dar tiempo a los científicos a resolver los problemas y disminuir, además, la carga de los trabajadores de la salud”.
PREGUNTA: Usted ha dicho que en la mayoría de las crisis vividas no se ha buscado la respuesta inmediata de la ciencia y ahora se pide a los científicos un solución rápida, ¿qué ha cambiado?
RESPUESTA: Creo que esta crisis de la COVID-19 es una crisis en la que la ciencia biomédica puede proporcionar la única solución. Una vacuna, un medicamento y una comprensión detallada de la epidemiología son las únicas formas de poner fin a esta pandemia.
P: ¿Es posible dar una respuesta rápida a un virus que aún no se conoce totalmente?
R: Es mucho más difícil que eso porque ahora tan solo empezamos a conocer la estructura de importantes biomoléculas que podrían ser útiles para fármacos o vacunas. Estos son los comienzos de un proceso muy largo. Si podemos encontrar un medicamento que pueda ser reutilizado, entonces podremos llegar a algún lugar más rápido.
P: El método científico es muy claro. En una situación como esta, ¿cómo de rápida puede ser la ciencia?
R: Lo más probable es que la ciencia pueda darnos una vacuna y medicamentos, pero es un proceso difícil de acortar porque involucra el curso natural de la biología.
P: ¿Han cambiado las reglas para publicar en Science artículos relacionados con el SARS-CoV2 y la COVID-19?
R: Las reglas no han cambiado. Estamos procediendo tan rápido como podemos y animando a los científicos a subir sus trabajos a repositorios de artículos previos a la revisión por pares y publicación, para que la comunidad científica pueda ver los resultados mientras nosotros los procesamos. Hemos conseguido que los artículos sean revisados y publicados en unas dos semanas, lo que es extremadamente rápido.
P: Usted dijo que le preocupa que la ciencia pueda terminar prometiendo en exceso posibles respuestas a la COVID-19, ¿por qué?
R: El mundo tiene la esperanza de que esto termine y encontrarse, ellos y sus familiares, a salvo. Esto, para la ciencia, podría crear la tentación de decir que se puede cumplir con una línea de tiempo concreta, pero esta línea de tiempo es muy incierta y está determinada por factores biológicos que son difíciles de controlar.
P: ¿Existe el riesgo entonces de crear falsas expectativas?
R: Sí, por las razones que he expuesto anteriormente.
P: Para usted, ¿cuál es ahora la mayor urgencia?
R: Mantener el distanciamiento social para dar a los científicos tiempo para resolver estos problemas y disminuir la carga de los trabajadores de la salud.
P: ¿Cuándo se van a conseguir medicamentos y vacunas?
R: Los expertos sostienen que la vacuna no estará antes de un año, año y medio. Creo que esto es realista. En relación a los medicamentos depende de si se pueden usar fármacos ya existentes; remdesivir es el más prometedor y podríamos saber algo en un mes o dos. Si se trata de uno nuevo, tendremos que esperar mucho más.
P: ¿Están los políticos en general a la altura? ¿En particular en su país?
R: La respuesta política varía dependiendo del sitio. En Estados Unidos el mayor problema es que los políticos dicen cosas confusas y no permiten a los expertos en salud liderar el discurso. La gente necesita escuchar el mensaje de que esto es serio pero que lo vamos a superar, con un horizonte temporal incierto.
Cuanto más intentan los políticos dar un calendario explícito, menos cuidadosa se mantendrá la población sobre lo que ahora es imprescindible hacer.
Fuente: EFE