Arqueólogos egipcios y japoneses se encuentran restaurando una barca funeraria que el faraón Keops, de la cuarta dinastía del Imperio Antiguo de Egipto, ordenó construir hace más de 4,500 años.
Para ello, los científicos inauguraron un laboratorio de lona a los pies de las pirámides, en el que se reconstruirá la estructura que hoy recibió la quilla, una de las piezas más importantes para su reparación.
Los investigadores levantaron el tablón de madera desde su lugar de enterramiento con poleas y lo trasladaron hasta el laboratorio de lona con extremo cuidado, suspendido de una viga, para evitar cualquier daño.
El supervisor de conservación del laboratorio, Eisa Zidan, dijo que la madera está «en condiciones muy malas, muy deteriorada», porque se filtró humedad en la cámara en la que estaban enterradas.
En este momento, las piezas del bote están siendo sometidas a un tratamiento de limpieza química, a las que después se les aplicarán conservantes para evitar que la madera se siga degradando.
El grupo de arqueólogos espera concluir en 2020 la extracción de las cerca de 600 piezas en las que fue desmontado el barco solar. Luego, dedicarán otros cinco o seis años para volver a montar la barca, lo que se hará en el futuro Gran Museo Egipcio.
El nuevo laboratorio, equipado con microscopios y equipos de restauración de última generación, ha costado cerca de 55 mil dólares y ha sido pagado por la Universidad de Waseda de Japón, según informó el Ministerio de Antigüedades egipcio.
Esta barca es una de las cinco que fueron enterradas junto a la famosa tumba de Keops, de las que sólo una ha sido rescatada y se expone en una sala especial habilitada junto a su pirámide, mientras que los restos de otras dos fueron saqueados y la quinta aún no se ha recuperado.
La primera barca fue descubierta en 1954 y su restauración se prolongó por dos décadas; la segunda fue descubierta en 1985, pero su extracción sólo comenzó en 2012, después de que se concluyeran los estudios previos.
Fuente: EFE