Modernización del TLCAN debe traer beneficios para los tres países y reducir brechas de desigualdad: Comisión Permanente

La Mesa Directiva de la Comisión Permanente señaló que al dar inicio las mesas de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), debe construirse un nuevo modelo de cooperación entre México-Estados Unidos y Canadá, con beneficios equitativos para los tres países para disminuir la desigualdad entre nuestras sociedades.

“Como mexicanas y mexicanos esperamos la construcción de un nuevo modelo de cooperación e intercambio entre los países, con la participación democrática y transparente en todos sus términos y condiciones”, expresó la diputada Gloria Himelda Félix Niebla, vicepresidenta de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente, al dar lectura al pronunciamiento.

Destacó que México está listo para modernizar el Tratado de Libre Comercio, siempre y cuando sea en el marco del respeto de la soberanía de cada país y en aras de alcanzar acuerdos que beneficien a los tres socios y a la mayoría de sus poblaciones.

“Esperamos que las negociaciones comerciales tengan una visión clara de lo que se necesita. Se han integrado a este proceso de negociación destacados integrantes del Poder Legislativo federal, poseedores de una gran experiencia”, indicó.

Señaló que serán negociaciones difíciles y delicadas, con horas intensas de trabajo y construcción de acuerdos, cuyos resultados deberán propiciar que el TLCAN mantenga, como lo debe de ser, un acuerdo trilateral que garantice su continuidad y mejore los mecanismos de su cumplimiento.

“Nuestra experiencia demanda del reforzamiento de procedimientos para la resolución de disputas comerciales, acompañado de un marco para una mayor cooperación trilateral, regional y multilateral que nos permita ampliar los beneficios de acuerdo comercial”, expuso.

La vicepresidenta de la Comisión Permanente resaltó que la modernización de este acuerdo global que establece las reglas del comercio internacional y las inversiones entre México, Estados Unidos y Canadá, se hace necesaria ante la elevada competencia y el crecimiento de las relaciones comerciales entre todas las naciones.

“Hacemos votos para que en esta etapa de modernización sea posible la disminución de la desigualdad entre nuestras sociedades”, expresó.

Previo a la lectura de este pronunciamiento, los grupos parlamentarios manifestaron sus posiciones políticas respecto al inicio de las mesas de negociación del TLCAN.

La diputada Rocío Nahle García, coordinadora del Grupo Parlamentario de MORENA, consideró que la posición del Gobierno mexicano en la renegociación del TLCAN, “es la de ceder a algunas exigencias a cambio de algunos logros en materia arancelaria, los que por cierto son a conveniencia de la operación de trasnacionales”.

Dijo que hay que estar muy pendientes de lo que en estas rondas de negociación suceda, “no podemos aceptar que se negocie a costa de la política energética y el campo mexicano, de ceder más espacios y atribuciones a una inversión extranjera cuando perdemos soberanía (…), debemos encontrar un equilibrio natural que sea benevolente para el pueblo de México”.

A nombre del Partido Verde Ecologista de México, el diputado Emilio Salazar Farías señaló que el TLCAN debe adecuarse a los nuevos tiempos y ello no tiene que ser visto como algo malo, la renegociación de este instrumento nos puede ayudar mucho en sectores como las comunicaciones y el energético.

Hay que ver este tema con mucho ánimo, donde podemos tener logros, hoy toca buscar lo económicamente mejor para el país, ese es el reto, acotó.

Miguel Barbosa Huerta, senador del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo, dijo que México debe rechazar cualquier intento de aplicar medidas proteccionistas, y si Estados Unidos insiste, el Gobierno mexicano debería considerar retirarse del proceso de negociación.

Tampoco se debe aceptar la eliminación del Capítulo 19, sobre el mecanismo de defensa de disputas entre los países miembros; y debe pugnar por incluir la movilidad laboral en el TLCAN. Asimismo, dijo que el presidente del Senado debería tener un lugar entre los tres negociadores.

El senador Isidro Pedraza Chávez, del grupo parlamentario del PRD, refirió que no se ha realizado una evaluación del Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Canadá y México; por lo que en esta renegociación se deben establecer pautas de evaluación.

Abundó en que el Senado de la República tiene que realizar foros de consulta para recoger las opiniones de los sectores productivos del país, y buscar la inclusión de éstas en las discusiones del TLCAN.

La senadora del PAN, Laura Angélica Rojas Hernández, al fijar la posición de su Grupo Parlamentario, aseguró que la renegociación del TLCAN es una oportunidad para zanjar las controversias históricas que se han tenido en torno a algunos productos como azúcar, atún, autotransporte y madera.

Se pronunció en contra de la eliminación del artículo 19 del tratado, dijo que la renegociación es un tema de Estado y, por tanto, dentro de las negociaciones debe haber una mejora en el comercio agrícola, incrementar la participación de los emprendedores, promover el piso parejo en intercambios comerciales, integrar el sector energético y telecomunicaciones, reforzar las regulaciones ambientales y no aceptar nuevos aranceles.

La senadora del PRI, Rocío Pineda Gochi, enfatizó que la renegociación del TLCAN es una oportunidad para avanzar hacia un comercio regional inclusivo, promover la certidumbre del comercio y las inversiones en la región.

Señaló que la coyuntura internacional obliga actuar con responsabilidad en temas como el cambio climático, la migración o el crimen organizado e indicó que la propuesta mexicana es innovadora, toda vez que incluye asuntos como la mayor participación de las pequeñas y medianas empresas, las cadenas de valor, la incorporación de la perspectiva de género, mecanismos de movilidad laboral y al aprovechamiento de las nuevas tecnologías.