Trastornos del sueño después de un traumatismo de cráneo son más graves en hombres que en mujeres

Luego de un traumatismo de cráneo, las mujeres tienen trastornos de sueño más graves que los hombres, según sugiere un nuevo estudio.

“Las mujeres que tienen más problemas para dormir tienden a tener cefaleas más fuertes, más trastornos del ánimo y complicaciones cognitivas más graves, mientras que las mujeres sin tantas dificultades para dormir tienden a tener menos problemas de salud en general. Esas secuelas son mucho peores en ellas que en ellos”, indicó la autora principal, doctora Temitayo Oyefunmike Oyegbile, del Hospital MedStar de Georgetown University, Washington.

“Es importante que los médicos sepan que las mujeres son más propensas a tener traumatismos de cráneo y que, cuando eso ocurre, son más propensas que los hombres a tener reacciones adversas”, agregó.

“De modo que al atender a una mujer con un traumatismo de cráneo, hay que dedicarle tiempo extra para evaluar el sueño, las cefaleas, los cambios anímicos y la función cognitiva porque sabemos que pueden ser más graves”, indicó la doctora.

En Sleep Medicine, su equipo publica los resultados de una comparación de datos sobre mujeres y hombres de la ciudad de Washington de entre 10 y 35 años de edad.

El estudio evaluó la alteración del sueño basal en 1.284 personas: en 432 después de un primer traumatismo y en 296, tras traumatismos reiterados, en su mayoría durante la práctica de un deporte. Las pruebas incluyeron una batería de tests neurocognitivos y la evaluación de los síntomas.

Luego de un traumatismo, las mujeres tenían más alteraciones del sueño que los hombres, aunque esa diferencia era evidente sólo en los mayores de 15. Tras varios traumatismos, los hombres y las mujeres tenían una alteración del sueño similar, sin importar la edad.

En el grupo que había sufrido un traumatismo de cráneo, las mujeres con trastornos del sueño eran más propensas que los hombres a tener cefaleas graves (p=0,031). Hombres y mujeres sin una alteración del sueño significativa tenían dolores de cabeza mínimos.

En el grupo de participantes tratados por un trastorno del ánimo después del traumatismo, las mujeres eran más propensas que los hombres a tener trastornos del sueño (p=0,038). Los hombres y las mujeres sin alteraciones del sueño significativas eran más propensos a consultar por algún trastorno anímico, según publica el equipo.

Fuente: Reuters