El futuro del planeta se juega en 0,5ºC

Una nueva investigación publicada en Nature Climate Change advierte que basta medio grado más de temperatura para que aumenten las olas de calor y los episodios de lluvias torrenciales en numerosas regiones del planeta.

Los investigadores han comparado dos periodos de veinte años entre los cuales las temperaturas mundiales medias han subido 0,5ºC: el periodo comprendido entre 1960 y 1979, por un lado, y el comprendido entre 1991 y 2010, por otro.

De esta forma descubrieron que medio grado Celsius más de temperatura fue suficiente para multiplicar e intensificar en ambos periodos episodios caniculares y lluvias torrenciales en numerosos países.

En ambos periodos, la intensidad de las precipitaciones extremas aumentó un 10% en una cuarta parte de la superficie del planeta. Las sequías, por su parte, se prolongaron una semana más en la mitad de las regiones.

Como la temperatura del planeta ya ha subido 1ºC en relación a la temperatura de la era industrial, la observación de lo que ha pasado en los últimos años señala lo que puede ocurrir cuando la temperatura global sube. Los modelos climáticos existentes permiten predecir lo que puede ocurrir con el clima a partir de esas observaciones, según los investigadores.

Debido a la combustión de las energías fósiles, el calentamiento global se ha acelerado en los últimos 50 o 60 años, señalan los científicos. Entre 1960 y 1979 y entre 1991 y 2010, los veranos han ganado  1ºC de temperatura en una cuarta parte de las regiones del mundo y los inviernos han escalado hasta los 2,5ºC.

Los investigadores destacan que una diferencia de medio grado de temperatura es realmente importante para provocar cambios climáticos.

Límite en 1,5ºC

Aunque numerosos países se han comprometido a limitar el calentamiento global por debajo de los 2ºC sobre la temperatura que existía durante la revolución industrial, en virtud del Acuerdo de París (2015), los investigadores estiman que un calentamiento de 2ºC, en vez delos 1,5ºC, duplicará la severidad del estrés hídrico, las malas cosechas y las canículas en casi todo el mundo.

Sin embargo, contener la temperatura por debajo de 1,5ºC en relación con la existente durante la revolución industrial daría una oportunidad a los arrecifes de coral, piedra angular de los ecosistemas de los que dependen casi 500 millones de personas y una cuarta parte de la flora marina, señalan los investigadores.

Este umbral permitiría a los corales adaptarse a los océanos más cálidos y acidificados. Sin embargo, ese medio grado más expondría a los arrecifes de coral a una eventual extinción a finales del presente siglo, advierten los investigadores.

El Acuerdo de París se propone mantener el aumento de la temperatura media mundial por debajo de 2 °C con respecto a los niveles preindustriales, e incluso limitar ese aumento de la temperatura a 1,5 °C con respecto a los niveles preindustriales, reconociendo que ello reduciría considerablemente los riesgos y los efectos del cambio climático.

Este estudio viene a señalar la importancia de contener la subida de la temperatura global por debajo de 1,5ºC respecto a la era industrial, más que por debajo de los 2ºC, ya que viendo lo que ha pasado en los dos periodos analizados, esa diferencia de medio grado es suficientemente importante para evitar nuevas  catástrofes climáticas.

Fuente: tendencias21.net