EU da la voz de alarma sobre los temibles robots de combate rusos

Varios analistas estadounidenses han alertado sobre el rápido crecimiento y desarrollo de tecnología robótica armamentística en Rusia. En la práctica, estos robots han sido empleados con el único objetivo de desminar explosivos en Siria, publica en su último artículo la revista estadounidense The National Interest.

Los robotanques o vehículos de combate no tripulados se llevan utilizando en Siria con éxito desde hace años, específicamente el modelo radiodirigido Uran-6, especializado en desmantelar minas antipersona.

Así, dependiendo del tipo de actividad militar requerida, los especialistas pueden utilizar uno de los cincos dispositivos de rastreo implementados en el arsenal. Pese a que este tipo de tecnología no tiene nada único ni especial, hay que resaltar su creciente implementación y mejora por parte del Ejército ruso, lo que a su vez es un indicio de cómo Rusia ha recortado terreno a los países occidentales en la adaptación de sistemas robóticos, informa la revista.

El moderno complejo robótico Uran-6 podría considerarse como un paso hacia el futuro, pues los rusos ya están desarrollando más dispositivos robóticos en esta línea, incluyendo varios vehículos blindados de combate no tripulados (UGV, por sus siglas en inglés) para cubrir distintas misiones, reseña la publicación.

“Es muy probable que el Uran-6 fuera un banco de pruebas para otros vehículos de combate no tripulados”, resalta Samuel Bendett, investigador del Centro de Análisis Naval. Y las Fuerzas Armadas de Rusia lo corroboran, afirmando que su robotanque Uran-9 puede llegar a realizar varias misiones terrestres.

El modelo Uran-9 se desarrolló inicialmente como robot explorador con el objetivo de destruir tanques de combate y ofrecer apoyo móvil contra incendios. El dispositivo posee la capacidad de impactar sobre blindados volando a baja altura a una distancia de hasta cinco kilómetros y 3.000 metros de noche. Asimismo, cuenta con cuatro misiles guiados antitanque Ataka, un cañón automático de 30 mm 2A27 y una ametralladora coaxial de 7,62 milímetros o un lanzallamas Shmel-M.

En la actualidad, el Ministerio de Defensa de Rusia está llevando a cabo pruebas comparativas entre los modelos de robots de combate Nerejta, Soratnik y Uran-9 para determinar qué vehículo blindado no tripulado deben poner en servicio.

Fuente: sputniknews.com