Seis años después, un equipo de drones encuentra el uranio fundido en el reactor de la planta de Fukushima

Ocurrió el 11 de marzo del 2011, un tsunami provocó un desastre nuclear en la planta de energía de Fukushima. Ahora, por primera vez y tras seis años de búsqueda, un equipo de drones ha sido capaz de capturar imágenes del combustible de uranio fundido presente en el reactor.

El accidente propició que tres de los seis reactores nucleares se derritieran. En ese momento, sus barras de combustible de uranio se licuaron, derritiéndose a través de capas de acero y concreto. Precisamente esto hizo que a los investigadores les resultara difícil determinar dónde había terminado el uranio.

Mientras que las barras se enfriaban cuando los trabajadores bombeaban agua a las plantas del reactor, no había manera de saber hasta dónde habían viajado. De hecho, los ingenieros tardaron tres días en enviar un pequeño dron a través de los pasillos de los edificios inundados para encontrar el combustible.

Sin embargo, todos los intentos previos con el uso de robots fueron un fracaso. Hasta ahora. Los investigadores construyeron unos nuevos modelos de drones a partir de materiales resistentes a la radiación, unos dispositivos que están equipados con un sensor que les permite evitar áreas particularmente peligrosas. Esto es un gran avance para tratar de paliar el desastre de hace seis años. Como explica Takahiro Kimoto, uno de los hombres en la planta de energía:

Hasta ahora, no sabíamos exactamente dónde estaba el combustible, ni cómo era. Ahora que lo hemos visto, podemos hacer planes para recuperarlo.

En la secuencia capturada por los drones se puede apreciar los posibles restos de combustible. Durante todo este tiempo, más de 7.000 personas han estado trabajando en la planta nuclear construyendo nuevos tanques de almacenamiento de agua, ayudando a deshacerse de los desechos radiactivos y construyendo andamios sobre los edificios del reactor, la mayoría muy dañados.

A su vez, el nivel de protección necesario para trabajar se ha ido reduciendo gradualmente. Hace un año, se requería ropa especial en todas las áreas. Ahora la ropa de calle está permitida en todas partes, excepto en la zonas que siguen siendo muy radiactivas.

Se espera que el siguiente paso sea iniciar la eliminación del combustible de uranio fundido de uno de los reactores, posiblemente a partir del 2021, aunque primero tienen que decidir cuál de ellos será el primero. Un proyecto a largo plazo para tratar de paliar uno de los grandes desastres medioambientales de la historia. Pasarán décadas antes de que se termine de limpiar la planta, cuando ocurra, el proyecto habrá costado decenas de miles de millones de dólares.

Fuente: Futurism