Japoneses pierden comunicación con dos robots en asteroide Ryugu y todo lo que quedó fue esta foto

Dos pequeños robot saltarines lanzados por la agencia espacial japonesa JAXA parecen haber llegado a su destino final, aunque hasta el momento no es claro si es que están seguros y salvos en la superficie del mismo.

Lo único cierto que tenemos hasta el momento es esta llamativa imagen de la sombra de uno de ellos, aterrizando en el asteroide desde la nave Hayabusa2.

Los minirobots MINERVA-II1A Y MINERVA-II1B se separaron de la nave madre, Hayabusa2, tal y como se planeaba a las 4:06 GMT esta mañana y aparentemente se posaron sobre el asteroide Ryugu.

¿Robots aislados?

El equipo de Hayabusa2 confirmó el despliegue de los rovers y estableció comunicación con ellos rápidamente. Sin embargo, el enlace fue perdido esta mañana muy temprano. Los miembros de la misión han dicho que “no hay razón para entrar en pánico”, de acuerdo a Space.com.

“La comunicación actualmente se ha detenido. Se debe probablemente a la rotación de Ryugu, y MINERVA-II1 está actualmente en el lado lejano del asterioide. Actualmente estamos trabajando para confirmar si hay imágenes capturando el aterrizaje de MINERVA-II1”, dijo el equipo de Hayabusa2 en Twitter a las 10:00 GMT.

El aislamiento a un lado del asteroide sería un problema temporal. Ryugu completa su rotación cada 7.5 horas, por lo que MINERVA-II1 debería volver a estar en el radar pronto, si es que no lo está ya. Por el momento, es toda la información que ha llegado.

Una empresa de alta complejidad

No se puede asumir que todo está en perfectas condiciones, por la dificultad de llegar a un asteroide a 300 de millones de km de la Tierra. Es difícil pegarse a un cuerpo con un empuje gravitacional tan ligero, como lo mostró la experiencia de la misión de la Agencia Espacial Europea (ESA) con Rosetta.

El 2014, Rosetta dejó caer al robot Philae en la superficie del cometa 67P, de un ancho de 4 km. Philae debía encancharse a la superficie con un harpón, pero la idea no funcionó y rebotó varias veces antes de caer definitivamente en un paraje sombrío. Como consecuencia, no pudo recibir luz solar y no recargó sus baterías como se planeó, por lo que el trabajo científico realizado se quedó corto.

Los ingenieros de Hayabusa2 están haciendo todo lo posible para salvar al plan MINERVA-II1, pero solo nos queda esperar.

Hayabusa2 costó 150 millones de dólares, y fue lanzada en diciembre del 2014. El despliegue de MINERVA-II1A y MINERVA-II1B es parte de un ambicioso proyecto de exploración espacial.

Fuente: nmas1.org