El IPN y UNAM participan en recreación del estado del universo tras Big Bang

Una investigación, en la que participaron científicos mexicanos del IPN y la UNAM, logró recrear el estado del universo 10 microsegundos después de que ocurrió el Big Bang. Con este logro, la ciencia avanza en el conocimiento sobre el origen del universo.

La comunidad científica mexicana estuvo representada por el Cinvestav del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) y la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).

La hazaña se logró gracias a ALICE (A large Ion Collider Experiment, por sus siglas en inglés), uno de los detectores del Gran Colisionador de Hadrones (LHC) que se encuentra en el Centro Europeo de Investigaciones Nucleares (CERN), en Ginebra, Suiza, y donde participan investigadores de todo el mundo, incluido México.

ALICE, cuyo objetivo es colisionar iones de plomo a velocidades cercanas a la luz, logró obtener la formación de un plasma denso y caliente conocido como quark-gluón, que según los expertos era la forma en que se encontraba el universo después de ocurrir el Big Bang.

El investigador titular del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Gerardo Herrera Corral, recordó que los quarks son partículas elementales de la materia.

“Lo que hemos observado, que nos parece espectacular y que un tema de estudio muy interesante por las consecuencias que va a tener es que este plasma de quarks y de iones se comporta como un líquido perfecto”, expuso en conferencia de prensa.

“Lo que acaba de observar ALICE y lo que está anunciando como descubrimiento es que por alguna razón que no esperábamos es que con la colisión de protones contra protones se produce una gran cantidad de partículas. Si bien lo entendíamos en el caso de colisiones de iones de plomo, no sabemos por qué lo hacen los protones”, detalló.

Además, dijo, el hallazgo publicado en la revista Nature Physic abre la posibilidad de temas para entender cómo se producen las partículas y cómo se generan los quarks extraños en una forma más simple y exacta.

“Queremos saber cómo era el universo cuando recién había ocurrido el Big Bang. Queremos entender cómo se originó y hemos entendido que viene de un plasma de quarks”.

También adelantó que a pesar de que el Gran Colisionador de Hadrones ha causado revuelo en el mundo por sus 28 kilómetros de perímetro y que rebasa la frontera de Suiza y Francia podría quedar como un anillo “pequeñito” ante la propuesta del CERN de crear el nuevo anillo ETCC de 100 kilómetros de diámetro.

“De manera que el Gran Colisionador de Hadrones solamente será un inyector y se utilizará para alimentar al ETCC y es el mejor momento para que México se involucre en un proyecto de ese tipo”, puntualizó.

Fuente: Notimex