Un cambio en la química oceánica marcó la aparición de esqueletos y conchas en la vida marítima

Los esqueletos y las conchas aparecieron por vez primera hace 550 millones de años, en cuanto la composición química del agua marina adquirió las cualidades adecuadas, según las conclusiones a las que se ha llegado en un nuevo estudio.

La transición desde una fauna marina exclusivamente compuesta por animales de cuerpo blando, hasta una fauna con la presencia adicional de criaturas con cuerpo provisto de partes duras, pudo ser muy suave, desarrollándose conforme se elevaron los niveles de oxígeno y cambiaron los de calcio y magnesio en las aguas de los mares prehistóricos. Así lo cree el equipo de Rachel Wood, de la Universidad de Edimburgo en Escocia, Reino Unido.

Hasta ahora, poco se sabía sobre cómo se desarrollaron por primera vez los esqueletos y las conchas, que están hechos de carbonato cálcico.

Las teorías anteriores sugerían que los organismos de cuerpo blando sufrieron una extinción masiva, lo que permitió prosperar a los organismos con esqueletos y conchas.

Sin embargo, el equipo de Wood ha encontrado que las formas de vida más primitivas con partes del cuerpo duras coexistieron con especies muy emparentadas evolutivamente de cuerpo blando.

El equipo examinó una serie de fósiles desenterrados de rocas de caliza en Siberia, que se formaron hace millones de años a partir de agua marina con altos niveles locales de carbonato cálcico.

Wood y sus colegas han llegado a la conclusión de que las formas de vida de cuerpo duro comenzaron por estar presentes solo en lugares muy específicos, donde los altos niveles de carbonato cálcico permitían a los organismos desarrollar partes duras.

Tiempo después, la diversidad de la vida de la Tierra se incrementó rápidamente, un período conocido como la explosión del Cámbrico, y los seres con cuerpo duro empezaron a florecer. Una amenaza mayor de los depredadores impulsó a las formas de vida a desarrollar nuevas partes duras y más complejas, en entornos que eran menos ricos en carbonato.

El desarrollo de las partes corporales duras, a través de un proceso llamado biomineralización, marcó un avance evolutivo importante desde el anterior mundo de vida con cuerpos blandos.

Fuente: noticiasdelaciencia.com