Crean estudiantes bioplástico de cereales que protege alimentos y además es consumible

El Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW, por sus siglas en inglés) refiere que una bolsa de plástico tarda en degradarse entre 400 y mil años, y su tiempo promedio de uso es de 10 minutos.

A fin de brindar una posible alternativa orgánica antes esta problemática, dos alumnas de la Universidad Tecnológica de los Valles Centrales de Oaxaca (UTVCO), crearon un polímero biodegradable que puede emplearse para elaborar bolsas o recubrimientos para el sector alimentario.

El biopolímero está elaborado con almidón de avena y compuestos antimicrobianos que cumplen funciones como barrera protectora contra la humedad, evita perdida de compuestos volátiles y retarda la oxidación enzimática. Asimismo, evita el desarrollo de los microorganismos como hongos, bacterias y levaduras.

“La película es cien por ciento biodegradable; además, si te la comes al día siguiente la digieres. Como empaque se degrada en menos de una semana, de manera que si lo tiras en la calle no daña al medio ambiente”, detalla Esbeydhy Oyuky Yescas Pérez, desarrolladora de la idea junto a Karina Hernández Miranda.

Las estudiantes de ingeniería en tecnología bioalimentaria de la UTVCO presentaron exitosamente su proyecto en el Primer Concurso Nacional de Emprendedores de las universidades tecnológicas y politécnicas, cuya sede fue la capital del estado, en julio de 2017.

A decir de Yescas Pérez, el biopolímero ha sido probado como recubrimiento alimenticio en frutas, en las que retrasa el proceso de maduración. Citó como ejemplo una manzana que en el anaquel de exhibición tiene un tiempo de vida de cinco días, mismo que puede prolongarse hasta diez, sin perder pigmentación ni firmeza.

Denominado Biotecno, el polímero orgánico inicia su proceso de degradación después de cuatro meses, cuando pierde sus propiedades físicas y químicas.

“Para la industria alimentaria le añadimos compuestos antimicrobianos para combatir hongos, levaduras y bacterias. Lo probamos en cárnicos con éxito, pero tendríamos trabajar más en ello”, aclara Yescas Pérez.

Hace hincapié en que ahora trabajan en mejorar la resistencia a fin de que iguale a un polímero sintético. “El modelo, en trámite de patente, se adaptará a otro tipo de cereales, considerando que lo que se aprovecha son los almidones”.

En nuestro país, de acuerdo con el Senado de la República, utilizamos diariamente 20 millones de bolsas de plástico, aproximadamente el uno por ciento de toda la basura producida en el país, lo que significa que 107.5 mil toneladas son bolsas de plástico por día. (Agencia ID)